Producto de la difícil situación económica que han sufrido los habitantes de todo Chile a muchos no les alcanza el dinero para una necesidad tan básica como es comer. Es por esto que distintos grupos de vecinos se han unido para hacer frente a la crisis. Este es el caso de la comuna de Petorca donde un grupo de habitantes decidieron tomar cartas en el asunto y autoimponerse la ardua labor de proveer el derecho fundamental a sus coterráneos. A comienzos de abril empezaron tímidamente una "olla solidaria" y solo unos días después ya tenían una red solidaria centralizada en tres sectores. Mónica Flores es quien planteó la idea de organizar estas ollas comunes en la comuna, posterior a ella de inmediato respondió la propuesta Jacqueline Valencia, quien hizo de su habilidad en la cocina su mejor forma de ayudar. Ella guión al resto de las voluntarias para elaborar almuerzos en Petorca y después su compromiso fue replicado por más personas en la localidad de Chincolco.
Desde abril a la fecha han entregado más de 2000 raciones de almuerzos, gracias a aportes propios y de donaciones realizadas por vecinos de la comuna. No obstante debido al sostenido avance del COVID-19 y a que varias de las voluntarias tienen enfermedades base, decidieron dejar de realizar ollas solidarias, para no exponer su salud. Sin embargo que no haya ollas comunes no significa que el apoyo de estas mujeres a su comunidad deje de estar. Ahora están en una cruzada para adquirir alimentos no perecibles y preparar bolsas de estos para ser entregadas entre las familias más afectadas económicamente por la pandemia en la comuna.
Quienes deseen colaborar con esta iniciativa, pueden enviar un mensaje a estas solidarias petorquinas a través de la página de Facebook: Red de Ollas Solidarias Chincolco Petorca.